Preparación

Primera fase: Preparación

Es la fase en la que el docente prepara el caso que sus alumnos van a estudiar. Las actividades que deben llevarse a cabo en esta fase son:

a. Formulación de los objetivos o metas

En el momento de formular objetivos educativos para el estudio de caso, el docente debe tener en cuenta los siguientes tres tipos de aprendizajes que potencian una formación integral del alumno:

Aprendizaje cognoscitivo: aprendizaje de los conocimientos que hacen referencia a los contenidos teóricos en los que se fundamenta el caso descrito.

Aprendizaje afectivo: aprendizaje de determinadas actitudes que el alumno puede lograr durante el desarrollo de esta técnica, tales como respetar la opinión de los demás, responsabilizarse de la realización de su trabajo, integrarse en un equipo.

Aprendizaje de habilidades: con el estudio de caso se fomenta en el alumno el pensamiento crítico, el análisis, la síntesis, la capacidad de aprender por cuenta propia, de identificar y resolver problemas y de tomar decisiones. Además, el alumno puede aprender determinadas habilidades concretas, como expresarse oralmente, trabajar en equipo, interactuar con otros.

b. Elaboración del caso

Una vez formuladas las metas, el docente elabora el caso. Para ello debe acudir a todas las fuentes documentales necesarias: artículos, relatos que describan sucesos o problemas de la vida real, experiencias propias o de profesionales experimentados, de sus propios alumnos, etcétera.

Para redactar correctamente un caso hay que tomar en cuenta los siguientes aspectos:
  • Tener claras las metas educativas a lograr.
  • Delimitar el alcance de la información.
  • Ser claro y conciso.
  • Utilizar una terminología adecuada al nivel escolar de los alumnos.
  • Omitir los detalles inútiles.
  • Incluir diálogos para hacerlo más real.
  • Finalizar el caso formulando preguntas básicas que ayuden a guiar el análisis.
  • Cuidar la presentación (giros gramaticales, espacios, estilo, etcétera).
Un buen caso se caracteriza por:
  • Permitir una lectura fácil.
  • Facilitar la rápida comprensión de la situación descrita.
  • Generar un flujo de preguntas, interrogantes e interpretaciones en el alumno.
  • Aceptar múltiples soluciones.
  • Facilitar el debate.
c. Formación de los grupos de trabajo

El estudio de caso es una técnica grupal, por lo que hay que formar equipos de trabajo. El docente puede decidir cómo deberán agruparse o darles a sus alumnos la libertad de hacerlo ellos mismos. Se recomienda que cada equipo sea de cuatro a seis personas.